La importancia de dicho partido se reflejaba en que una victoria del Alavés condenaba al Celta a los puestos de descenso a falta de tres jornadas, camiseta seleccion española peligrando así su existencia como entidad. Su insistencia tuvo premio en el minuto 80, en el que Iago remató con la cabeza un centro de su compañero Dani Abalo, poniendo por delante a los celestes a falta de diez minutos.